El futuro ya fue: lo están streameando desde Villa Soldati
¡El futuro ya fue: lo están streameando desde Villa Soldati!
El futuro ya fue: lo están streameando desde Villa Soldati
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Un día de estos, a eso de la medianoche, vas a abrir YouTube o Twitch y te vas a cruzar en un nuevo canal de stream con un trío de influencers que te hacen cagar de risa. Es la nueva moda. Son buenísimos, se lo merecen. Todo parece normal hasta que te enterás que son 100% virtuales. No existen. Nunca existieron. Son hijos del CPU y tienen acento porteño.
Este show de una hora lo arma un grupito de pibes desde una compu vieja, en jogging y con mate en mano. Se emite “en vivo” todos los días a las 00.00hs por YouTube y Twitch, y dura una hora. Todo lo genera la IA: las voces, las caras, los chistes, los quilombos. Incluso los recortes para redes salen editados y publicados solitos, un minuto después de que el sketch termina.
¿Costo? Una birra y un pancho.
Lo más loco: el programa es un éxito y le compite de igual a igual a los streams más vistos de Argentina. A puro algoritmo, pero con calle. Literalmente 30 veces menos que un programa posta.
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¿Querés más? Esto es posta y sucede hoy:
Conocé a Aitana López: casi 400k seguidores, campañas de moda, collabs, cara de “me levanté así”. Factura 12 lucas verdes por mes.
¿La joda? No existe. Es una modelo creada con IA.
Su creador gasta menos de 100 dólares por mes para mantenerla “viva”.
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Estos dos casos te hacen pensar que la revolución es la tecnología. Pero no.
La verdadera bomba es el contenido.
La idea. El mensaje. La historia.
La voz detrás del algoritmo.
Porque la IA sin cerebro es como un chiste sin remate: te deja esperando algo que nunca llega.
🧠 MORALEJA
El que tiene la audiencia, tiene el poder.
El resto son píxeles con wifi.
Ergo: Contenido mata todo.